Especialistas de la Universidad de Oxford anunciaron, en su reporte de septiembre, un clima inesperado para el próximo invierno, en particular en Europa, debido a que los vientos de gran altura sobre el Ecuador, con oscilación cuasi-bienal, fueron interrumpidos.
“Esta interrupción inesperada en el sistema climático cambia el ciclo de la oscilación cuasi-bienal para siempre. Y esto es importante, ya que es uno de los factores que influirán en el próximo invierno”, según el profesor Adam Scaife, de la Universidad de Exeter, y jefe de predicción a largo plazo en la Oficina de Meteorología del Reino Unido.
A finales de este mes, la universidad anunció que grupos de investigación internacionales se reunirán en Oxford para hablar de los orígenes y consecuencias de este evento.
A las alturas del flujo del aire estratosférico por encima de los trópicos se invierte la dirección de los vientos del Ecuador en manera regular cada 14 meses, completando el ciclo completo cada 28 a 29 meses. Esto permitía predecir con bastante anticipación como serían los próximos inviernos.
Hasta la fecha se sabe que los vientos del oeste “aumentan el riesgo de condiciones húmedas y cálidas, mientras que vientos del este traen un clima más seco y más frío".
Sin embargo un comportamiento inusual en febrero, dio cuenta de “una inversión del patrón esperado de los vientos”, que regulan este clima.
“Este cambio inesperado en la dirección del viento fue causado por las ondas atmosféricas en el hemisferio norte”, concluyó el informe internacional conjunto del Centro Nacional para la Ciencia Atmosférica (ANC) del Reino Unido en la Universidad de Oxford y la Oficina Meteorológica.
¿Por qué es importante?
Según la oficina de Meteorología (MET), los vientos del Ecuador casi bienales son importantes porque su alteración “puede afectar a la corriente en chorro del Atlántico”.
De hecho su cambio hace que se debilite y fortalezca la velocidad de los vientos en la corriente en chorro, que determina luego cómo será el clima en el invierno.
Cuando los vientos del Ecuador van al Este, la corriente en chorro será débil, causando un evento de calentamiento estratosférico repentino y un invierno más frío en el norte de Europa. En cambio cuando es del Oeste, la corriente de chorro es fuerte, y el invierno será suave, con aumento de tormentas y lluvias pesadas.
El geógrafo físico y climatólogo Pau Beckwith presentó recientemente algunas imágenes que evidencian un cambio también inesperado en las corrientes del chorro.
El investigador destacó que se estaban mezclando las corrientes de chorro de Norte y Sur, y señaló el hecho como poco documentado y estudiado por la comunidad científica, sobre todo por sus posibles consecuencias.
No se ha informado concretamente si este evento está relacionado a la interrupción inesperada de la dirección de los vientos sobre el Ecuador.
Los cambios regulares de la dirección del viento de la oscilación cuasi-bienal fueron mencionados por los meteorólogos del MET, desde la década de 1950.
Entre las hipótesis, es posible que se vuelva a “un comportamiento más típico en el próximo año, aunque los científicos creen que la oscilación cuasi-bienal podría llegar a ser más susceptible a las interrupciones similares a medida que el clima se calienta”, explicó el equipo de la Universidad de la Oxford.
FUENTE: La Gran Epoca, 13 / septiembre / 2016
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