El Ministerio de Situaciones de Emergencia ruso ha publicado este mes algunos pronósticos sobre el cambio climático en Rusia. Según el centro Anti-Stikhiya, a finales del siglo XXI la temperatura en el Ártico podría aumentar en siete grados como resultado del cambio climático.

Los expertos señalan que en el último siglo el ritmo del cambio climático en el territorio ruso ha sido entre 1,5 y dos veces más rápido que en otros lugares de la Tierra. Además, en la última década la alerta ha aumento considerablemente.

En opinión de Kokorin, coordinador del Programa de Clima y Energía de WWF Rusia, las predicciones del ministerio son bastante moderadas.
“En general, los departamentos equivalentes al Ministerio de Situaciones de Emergencia ruso en otros países suelen 'exagerar' y sus pronósticos tienen a ser más desalentadores que los de Greenpeace... Pero en este caso, desafortunadamente, estoy de acuerdo con la predicción del ministerio ruso”, declaró Kokorin.
 
¿Se está expandiendo el Ártico?
Los expertos señalaron que el aumento anual de de siete grados de media en la región del Ártico se distribuiría de una manera desigual según las estaciones. Por ejemplo, “subirá el doble durante el invierno y apenas cambiará durante el verano, de modo que definitivamente no crecerán plátanos allí”.(Este ha sido un chisto común entre los escépticos del cambio climático en Rusia.)
“Si se pasa de 45 grados bajo cero a 30 bajo cero, al principio parece que no puede haber gran diferencia. Pero sí que la hay, porque este cambio vendrá acompañado de violentas tormentas de nieve y viento, sobre todo en otoño y primavera. Esto supone una gran perjucio para el trabajo y la vida cotididiana, para el desrrollo de actividades económicas”, dijo Kokorin.
 
¿Cambia el clima más rápido en Rusia que en otras partes del mundo?
 
El experto de WWF confirmó que el cambió climático se da el doble de rápido en Rusia que en el resto del mundo. Este hecho significa, que “los daños vinculados a este proceso afectarán al país antes que a otros”.

“Evidentemente, las pequeñas islas estado se llevarán la peor parte: se inundarán y perderán parte de su territorio y las áreas costeras. De modo que actualmente están en negociaciones (en la ONU) y causan cierto revuelo porque entienden que van a encontrarse en una difícil situación, mientras el resto mira con indiferencia”, dijo Kokorin.

Los cálculos muestran que algunas consecuencias, como la reducción del volumen de agua dulce y el aumento del nivel de los océanos, no afectarán demasiado a Rusia. Aunque una de las posibles consecuencias es que aumente la frecuencia de condiciones climáticas peligrosas a medida que uno se aleja del ecuador y se dirige a los polos.

La diferencia en la velocidad del cambio climático se debe a la localización geográfica de Rusia, explicó el experto. Al calentarse los polos, aumentará movimiento de masas de aire entre latitudes altas y bajas también aumentará. Tanto en el ecuador como en los polos, no hay tanto movimiento, pero “las corrientes de aire serán mayores en las latitudes entre 50 y 80 grados, con alternaciones entre el norte y el sur”.
“Mientras más al norte estemos, el cambio de temperatura de las masas de aire será más pronunciado...Evidentemente, otros países situados en la misma latitud, como Canadá o EE UU también esperan esta situación, dijo Kokorin.

¿Inundaciones cada semana?

Los especialistas del Ministerio de Situaciones de Emergencia predicen que en las próximas décadas aumentará el número de desastres naturales, incluidas las inundaciones. El Ministerio calcula que más de 90 millones de personas, el 60% de la población de Rusia, vive en áreas expuestas a factores adversos que pueden resultar en accidentes potencialmente peligrosos. El daño económico que pueden causar estas emergencias podría llegar a alcanzar hasta el 1,5-2% del PIB de Rusia.

Según Kokorin, el aumento de la frecuencia de fenómenos peligrosos ligados al clima es una consecuencia más seria que el relativo rápido aumento de la temperatura media.
“Los más cautos estiman que a mediados de siglo se doblará o triplicará el número de fenómenos peligrosos. La siguiente pregunta es si los daños aumentarán de la misma manera o si podremos hacer algo para reducirlos”, dijo Kokorin.

Hasta ahora, los científicos solo pueden hacer este tipo de pronósticos en grandes áreas del planeta, como toda la parte norte de Eurasia o el este de Asia, y se reduce a dos parámetros básicos: temperaturas anómalas y una precipitación atmosférica anómala.
 
FUENTE:  RIA Novosti , Rusia Hoy, 26/ 03/ 2013