El “aquí y ahora” sostenido por varias corrientes de
pensamiento moderno considera que el tiempo presente es el único que debe ser
tenido en cuenta. El pasado ya fue, como dicen los jóvenes, y sobre el cual no
podemos hacer nada, salvo revisarlo. El futuro está más allá de nuestras
posibilidades, y es una fuente de ansiedad y angustia, dado que es todo
incertidumbre.
Por otro lado el
concepto de “sustentabilidad” nos dice que es muy importante vivir el presente
siendo cuidadosos y austeros con los recursos que disponemos, en vías de dejar
un planeta que permita ser un lugar adecuado para vivir a las generaciones que
nos sucedan.
Si uno mira a la ligera ambos conceptos, diríamos que son
antagónicos, el vivir “aquí y ahora” implicaría un total descuido para con
el futuro de las próximas generaciones, mientras que la idea de vivir
“sustentablemente”, nos limitaría en muchas de las cosas que queremos hacer
imperiosamente.
Debemos ser cautos y reflexionar, capacidad que solo tienen
los seres humanos, de cómo podemos compatibilizar ambas maneras de transitar la
vida, sin que una se devore a la otra.
Muchas veces el “aquí y ahora” es entendido como: “este es el
único tiempo que tengo para hacer todo lo que pueda darme satisfacción
inmediata”. Entonces me subo a todos los aviones que me llevan no se
adonde, me compro todos los artículos de
la vidriera que no sé cuando voy a poder utilizar, me relaciono en parejas
“touch and go” (y cuanto más rápido sea el “go” mejor), en suma, una vida de
consumo y más consumo, que conducen por caminos que no llevan a algún lugar donde se pueda vivir en armonía con uno
mismo, con los otros, y en buen equilibrio con universo.
Por otro lado, el concepto de “sustentabilidad” solicita otra
mirada respecto de la utilización de los recursos disponibles en el planeta, y
que podamos hacer un uso racional de los mismos. Muchas personas imaginan esta
idea como un recorte de las posibilidades de vivir la vida presente a “full” y
sin límites.
Como consideraba Aristóteles la prudencia es una de las principales
virtudes de los seres humanos, y pareciera que hoy es necesario ejercitarla de
manera profunda y en todos sus campos.
Sería importante pensar en un “aquí y hora sustentable”,
donde compatibilicemos ambos conceptos. Tendremos que analizar qué nos
pasa con la tremenda urgencia por correr
sin razón, por consumir irracionalmente, por no considerar al prójimo, ni al
futuro.
Ambas formas de vivir pueden compartir amigablemente la vida
moderna. Si imaginamos que lo que vamos a ser dentro de diez años tiene su
sustento en lo que somos y hacemos ahora, ya estamos empezando a relacionar el
“aquí y ahora”, con la “sustentabilidad”.
Solo es cuestión de darse cuenta (lo cual no es nada
sencillo), y ponerlo en práctica.
FUENTE: Juan José Olivieri, 24 / abril / 2015
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