MENOS CARNE Y MÁS VERDURA CONTRA EL CAMBIO CLIMÁTICO.

Los conservacionistas de WWF traen el calentamiento al global al menú navideño. Si nos olvidamos un poco de la carne y de los alimentos procesados, podríamos reducir hasta un 25% las emisiones de gases de efecto invernadero.

No se lo han sacado de la manga, sino que con la colaboración del Hospital Universitario La Paz y organizaciones de consumidores y de productores han analizado la huella del carbono en un montón de productos que acaban en nuestra mesa. Proponen unas navidades a base de hortalizas, sin renunciar al cordero asado y los dulces tradicionales.

Y para el resto del año, más de lo mismo: comer más vegetales, tirar menos comida -un tercio acaba en la basura-, consumir más alimentos certificados, respetar los recursos naturales de los que dependen la agricultura y la pesca... Otro argumento para desterrar los atracones de grasa: la mitad de los europeos sufren sobrepeso.

FUENTE: Hoy.es, 29 / 12 / 2014