- Asegura que en los últimos 30 años ya se han observado aumentos en las temperaturas medias y cambio en los patrones de precipitaciones.
- El IPCC se ha marcado la meta de reducir un 70% u 80% las emisiones nocivas para el medio ambiente en los próximos 30 años.
"No hay vuelta atrás en el cambio climático, solo se puede controlar su velocidad", según ha afirmado Anil Markandya, miembro del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) y director científico del Centro Vasco que analiza este fenómeno.
"Ya estamos inmersos en el proceso de cambio climático; en los últimos 20 o 30 años ya hemos podido observar un aumento de la temperatura media del planeta y de eventos extremos, así como cambios de patrones de precipitaciones", ha manifestado en una entrevista con Efe.
Tras asegurar que este fenómeno se ha originado inequívocamente por la actividad humana y la emisión de gases de efecto invernadero, Markandya ha augurado que el clima cambiará durante este siglo hacia temperaturas más altas y que "no existe la posibilidad de volver a la situación climática anterior".
El reto
Ha recordado que el IPCC ha marcado la meta de reducir en un 70-80 por ciento dichas emisiones en los próximos 30 años, aunque ha precisado que en el caso de que se consiga este objetivo, únicamente se lograría "estabilizar" el aumento de la temperatura y no superar un crecimiento mayor de los dos grados centígrados establecidos por la comunidad científica internacional
"La dirección es esa, y lo único que podemos hacer es controlar la velocidad de ese movimiento", ha dicho este profesor, que participó en el informe del IPCC sobre el cambio climático que compartió el premio Nobel de la Paz en 2007 con el exvicepresidente estadounidense Al Gore.
Pese a este escenario, Markandya considera que no se deben lanzar mensajes "alarmistas" sobre las consecuencias del cambio de clima, aunque ha recomendado "entender" que existe un riesgo de que se produzcan impactos climáticos extremos como un aumento del nivel del mar, lluvias fuertes o períodos largos de sequía.
"Si se sobrepasan ciertos límites o puntos de no retorno, puede suceder", ha alertado.
En su opinión, la "mejor" forma de convencer a los países para que cumplan las recomendaciones científicas de reducción de las emisiones de gases es trasladarles la idea de que se puede conseguir "a coste bajo", e incluso "asociado a muchas oportunidades de negocio".
Según cálculos de varios estudios internacionales, en los próximos 15 años el mundo debería invertir 90 trillones de dólares americanos en infraestructuras que mejoren las condiciones de vida de la mayoría de las ciudades, tanto en países desarrollados como en vías de desarrollo.
Dichas inversiones se pueden llevar a cabo de forma "sostenible, compatible con la reducción de gases de efecto invernadero, lo que supondría caminar hacia lo que se denomina crecimiento en verde".
Estas oportunidades de negocio son especialmente importantes en los países emergentes, que no están por la labor de reducir emisiones si supone frenar su crecimiento económico, ya que demostraría que "se puede conciliar crecimiento y reducción de emisiones".
Ha citado como ejemplo la construcción de viviendas o de plantas de energía, el diseño de las propias ciudades.... "todo esto -ha afirmado- se puede construir de forma sostenible o como en el pasado. Estamos en un momento crítico porque hay que tomar estas decisiones, que dejarán una herencia a las generaciones futuras".
Markandya también ha advertido de que el cambio climático no concierne solo a los gobiernos, sino que requiere de la contribución de los ciudadanos y de la educación que se transmita a los jóvenes para que cambien su estilo de vida y se reduzca "la huella del carbono".
"Individualmente se pueden hacer muchas cosas, desde acciones voluntarias en el consumo de recursos hasta comprar créditos cuando se viaja en avión para pagar la compensación de las emisiones de gases...se trata de desarrollar nuevas ideas", ha dicho.
FUENTE: te interesa. es , 29 / nov / 2014
No hay comentarios.:
Publicar un comentario