Un aumento de la temperatura promedio anual se aprecia en Cuba como consecuencia del cambio climático, alertó hoy una funcionaria del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma) al presentar aquí la Tarea Vida.
El ascenso de de 0,9 grados Celsius con incidencia en la población, la producción animal y la agricultura, afirmó la directora de Medio Ambiente del Citma, Odalis Goicochea, en la última jornada del VI Congreso Internacional de Producción Animal con representantes de 16 países.
Al decir de Goicochea, además de estar demostrado el incremento del nivel del mar, hay variaciones en el régimen de lluvias. Por esa realidad, el grupo empresarial Azcuba declaró afectada su producción. También, agregó, se observó un incremento significativo de la sequía, lo que repercute en una disminución de la disponibilidad de agua, argumentó.
Al referirse a las proyecciones futuras, dijo que se prevé la pérdida de la superficie terrestre por elevación del nivel del mar, el cual, según los expertos, subirá 27 centímetros para el 2050 y 85 para el 2100.
La especialista advirtió que en la venidera etapa el clima será más árido y áspero, y los paisajes secos de la zona oriental se pronostica que avancen al occidente del país, y -por supuesto- representa una mayor amenaza del proceso de desertificación.
La Tarea Vida, el Plan del Estado para el enfrentamiento al cambio climático, incluye cinco acciones estratégicas y 11 tareas dirigidas a neutralizar las afectaciones en las zonas vulnerables, expresó Goicochea.
Entre ellas se cuentan: no permitir construcciones de nuevas viviendas en los asentamientos costeros amenazados, desarrollar construcciones con infraestructura, adaptadas a las inundaciones costeras, y reducir las áreas de cultivos en las costas afectadas por la intrusión salina.
Por su parte, las 11 tareas están dirigidas a la protección costera de las ciudades, recuperación integral de playas, manglares y otros ecosistemas naturales protectores, obras hidráulicas y de ingeniería en las costas, entre otras.
Goicochea adelantó que se identificaron áreas priorizadas teniendo en cuenta la preservación de la vida de las personas, la seguridad alimentaria y el desarrollo del turismo.
Al decir de Goicochea, además de estar demostrado el incremento del nivel del mar, hay variaciones en el régimen de lluvias. Por esa realidad, el grupo empresarial Azcuba declaró afectada su producción. También, agregó, se observó un incremento significativo de la sequía, lo que repercute en una disminución de la disponibilidad de agua, argumentó.
Al referirse a las proyecciones futuras, dijo que se prevé la pérdida de la superficie terrestre por elevación del nivel del mar, el cual, según los expertos, subirá 27 centímetros para el 2050 y 85 para el 2100.
La especialista advirtió que en la venidera etapa el clima será más árido y áspero, y los paisajes secos de la zona oriental se pronostica que avancen al occidente del país, y -por supuesto- representa una mayor amenaza del proceso de desertificación.
La Tarea Vida, el Plan del Estado para el enfrentamiento al cambio climático, incluye cinco acciones estratégicas y 11 tareas dirigidas a neutralizar las afectaciones en las zonas vulnerables, expresó Goicochea.
Entre ellas se cuentan: no permitir construcciones de nuevas viviendas en los asentamientos costeros amenazados, desarrollar construcciones con infraestructura, adaptadas a las inundaciones costeras, y reducir las áreas de cultivos en las costas afectadas por la intrusión salina.
Por su parte, las 11 tareas están dirigidas a la protección costera de las ciudades, recuperación integral de playas, manglares y otros ecosistemas naturales protectores, obras hidráulicas y de ingeniería en las costas, entre otras.
Goicochea adelantó que se identificaron áreas priorizadas teniendo en cuenta la preservación de la vida de las personas, la seguridad alimentaria y el desarrollo del turismo.
FUENTE: Prensa Latina, 6 / nov / 2018
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