Por John Schwartz
El
calentamiento global representa una gama tan amplia de riesgos para la
humanidad, con tantos tipos de fenómenos implicados, que para finales de este
siglo algunas partes del mundo podrían enfrentarhasta seis crisis relacionadas con
el clima al mismo tiempo, según investigadores.
Esta
perspectiva se describe en un artículo publicado el 19 de noviembre en la
respetada revista académica Nature Climate Change,
en el cual se muestran los efectos del cambio climático a lo largo y ancho de
un extenso espectro de problemas, entre los que se incluyen las
olas de calor, los incendios forestales, el aumento del nivel del mar, los
huracanes, las inundaciones, las sequías y la escasez de agua potable.
Estos
problemas ya se presentan en una forma combinada, menciona el autor principal, Camilo
Mora, de la Universidad de Hawái, campus Manoa. Mora hizo notar
que hace poco tiempo Florida había experimentado una sequía extrema, récords de
temperaturas altas e incendios forestales, además del huracán Michael, la
poderosa tormenta categoría cuatro que azotó al estado el mes pasado. De forma
similar, California está sufriendo los peores incendios forestales en la
historia del Estado, así como sequías, olas extremas de calor y una pobre
calidad del aire que amenaza la salud de los residentes.
La situación va a empeorar,
sentenciaron los autores del artículo. El trabajo proyecta tendencias a futuro
e indica que, para 2100, si la humanidad no toma cartas urgentes en el asunto
para detener las emisiones de gases de efecto invernadero que fomentan el
cambio climático, algunas áreas costeras tropicales del planeta, como la costa
atlántica de Centro y Sudamérica, podrían enfrentar hasta seis crisis al mismo
tiempo.
Esa
posibilidad es “como una película de terror, pero real”,
mencionó Mora.
Los
autores incluyeron una lista de advertencias sobre la investigación: debido a
que se trata de una revisión de artículos, se reflejan algunos de los sesgos
potenciales científicos en esta área, entre los cuales se encuentra la
posibilidad de que los científicos podrían haberse concentrado en los efectos
negativos más que en los positivos; también hay un margen de incertidumbre
respecto de la diferencia entre la huella del cambio climático y la
variabilidad natural.
Para
2100, Nueva York podría esperar el golpe de cuatro crisis climáticas al
mismo tiempo si las emisiones de carbono continúan al paso actual, según el
estudio, pero si las emisiones se reducen de manera significativa esa cifra
quizá se pueda reducir a uno. Las regiones en problemas de las costas
tropicales podrían ver cómo se reduce de seis a tres el número de riesgos
simultáneos.
El
artículo explora las formas en que el cambio climático intensifica peligros,
además de describir la naturaleza interconectada de estas crisis. Al calentar
la atmósfera, las emisiones de gases de efecto invernadero pueden aumentar las
sequías en lugares que son secos por naturaleza, “haciendo madurar condiciones
para los incendios forestales y las ondas de calor”, aseguraron los investigadores.
En zonas más húmedas, una atmósfera más caliente retiene un mayor grado de
humedad y fortalece los aguaceros, mientras que el aumento en el nivel del mar
dispara la cantidad de tormentas y una mayor temperatura en las aguas marinas
puede contribuir a la destructividad general de las tormentas.
En
un mundo científico marcado por la especialización y la investigación aislada,
en este esfuerzo multidisciplinario de veintitrés autores se revisaron tres mil
artículos sobre varios efectos del cambio climático. Los autores determinaron
467 maneras en que esos cambios en el clima afectan la salud física y mental de
los humanos, la disponibilidad del agua, la infraestructura y otras facetas de
la vida en la Tierra.
El
artículo concluye que la investigación tradicional sobre un solo elemento del
cambio climático y sus efectos puede omitir el panorama más completo de
interrelación y riesgo.
Asimismo, el cambio climático
tiene diferentes repercusiones para los ricos y los pobres, de acuerdo con los
autores: “Las pérdidas más altas de vidas humanas durante estos acontecimientos
climáticos extremos ocurrieron en naciones en vías de desarrollo, mientras que
lo más común fue que las naciones desarrolladas enfrentaran una alta carga
económica en cuanto a los daños y los requisitos de adaptación”.
En
general, la gente no está acostumbrada a enfrentar problemas como el cambio
climático, según Mora. “Como humanos, no sentimos el dolor de la gente que está
lejos o vivirá en un futuro lejano”, señaló. “Lo más normal es que
nos preocupemos por la gente más cercana a nosotros o que tiene un impacto en
nosotros, o por cosas que sucederán mañana”.
Por
lo tanto, aseguró Mora, la gente tiende a considerar que los sucesos pasarán en
el futuro remoto y se dice a sí misma: “Podemos solucionar estas cosas después;
tenemos problemas más urgentes ahora”. Sin embargo, agregó Mora, esta
investigación “documentó qué tan mal estamos”.
El
artículo incluye un mapa interactivo sobre la variedad de peligros en distintos
escenarios de emisiones para cualquier lugar del mundo, el cual produjo Esri,
una empresa que desarrolla sistemas de información geográfica. “Vemos que el
cambio climático realmente está redibujando las líneas en el mapa y
revelando las amenazas que aquejan a nuestro mundo en
todos los niveles”, mencionó Dawn Wright, la directora científica de la
empresa.
Michael E. Mann, un
científico especializado en el clima de la Universidad Estatal de Pensilvania
que no estuvo involucrado en el artículo, señaló que este trabajo enfatiza la
urgencia para entrar en acción a fin de detener los efectos del cambio
climático y demuestra que “los costos de la inacción superan por mucho los de
tomar cartas en el asunto”.
Hace
poco tiempo, Mann publicó un artículo en el que sugirió que los efectos del cambio
climático sobre la corriente en chorro (jet stream) están contribuyendo a una
serie de acontecimientos climáticos extremos durante el verano, como las ondas
de calor en Norteamérica, Europa y Asia, los incendios en California y las
inundaciones en Japón. Según Mann, el nuevo estudio encaja con esta
investigación y “es, si acaso, demasiado conservador”; es decir, podría
subestimar las amenazas y los costos asociados con el cambio climático que ha
provocado el ser humano.
Un
coautor del nuevo trabajo, Kerry Emanuel, del Instituto
Tecnológico de Massachusetts, alabó este enfoque
interdisciplinario. “Hay más de una forma de riesgo”, afirmó, pero los
científicos suelen concentrarse en su área de investigación. “Las naciones, las
sociedades en general, deben enfrentar muchos riesgos, y es importante poner
todo el panorama junto”.
Como
los líderes militares que desarrollan la capacidad de combatir guerras en más
de un frente, los gobiernos deben estar preparados para resolver más de una
crisis climática a la vez, aseguró Emanuel.
Mora
mencionó que había considerado escribir un libro o una película que reflejara
los resultados aterradores de la investigación. El título provisional, el cual
describe cuán urgente es la situación para la humanidad, es impublicable por
este medio. Mora dijo que su título alternativo sería el siguiente: Se
los dijimos.
c.2018
New York Times News Service
FUENTE: Clarín , 22/11/2018
No hay comentarios.:
Publicar un comentario