Para ponerte en situación, imagina vivir en un lugar donde un gesto tan cotidiano como es el de abrir un grifo y beber un vaso de agua es prácticamente imposible.
Como ya te habrás imaginado, África es el continente más castigado donde las tierras vulnerables a la desertificación o que ya están afectadas superan el 43%. Según las últimas previsiones de Naciones Unidas, en 2025, las dos terceras partes de las tierras cultivables en el continente africano se habrán perdido por lo que sólo alcanzarán para alimentar a un 25% de su población, quedando más de la mitad de sus tierras de cultivo fuera de uso en 2050.
Ante esta situación, cobra aún más importancia la labor de concienciación que se busca con la celebración del Día Mundial contra la Desertificación este 17 de junio, con el objetivo de construir un mundo inmune a la degradación de los suelos. Este año, la celebración coincide con la declaración del 2013 como Año Internacional para la cooperación en la esfera del agua. Un bien escaso ya que una de cada tres personas vive con escasez de agua y se prevé que para 2030 la escasez afecte a la mitad de la población mundial.
La desertificación en España
Puede que muchos penséis que este problema no nos afecta pero ¿y si te digo que España es el único país de Europa occidental que cuenta con grandes zonas con alto riesgo dedesertificación? Clima semiárido en muchos lugares, sequías estacionales, extrema variabilidad de las lluvias, suelos pobres con tendencia a la erosión y la lista continúa haciendo que España quizás sea más vulnerable a este problema global de lo que habías pensado al inicio de este post. ¿O no?
Para que te hagas una idea, más de dos terceras partes del territorio español pertenecen a la categoría de áreas áridas, semiáridas o subhúmedas secas, es decir, las más susceptibles de sufrir desertificación.
La peor parte se la llevan las Islas Canarias, donde Fuerteventura, Lanzarote, Gran Canaria y el sur de Tenerife corren el mayor riesgo. En la península Ibérica, los terrenos más áridos los encontramos en Murcia, Almería, Granada y parte del Levante. En resumen, tan sólo el norte de nuestro país está considerado libre de riesgo, según los datos que ofrece el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente
¿Qué podemos hacer ante esta situación?
Lo más importante es la concienciación sobre este problema. Para muchos de nosotros la desertización y la escasez de agua nos parece algo lejano pero nos toca más de cerca de lo que pensamos. Todos podemos hacer algo por ayudar, ya que no se requiere el uso de grandes tecnologías, sino que tenemos que cambiar nuestra actitud como individuos y sociedad ante asuntos como el cambio climático, el tratamiento de residuos, la gestión responsable del agua así como organizar los recursos y territorios con criterios de sostenibilidad.
Como dato final queremos que os quedéis con una de las previsiones que ha lanzado Naciones Unidas: en 2030 la escasez de agua podría desplazar hasta 700 millones de personas. Así que, en este Día Internacional contra la Desertificación, todos tenemos que tomar conciencia de que éste, es un problema que nos afecta a todos.
FUENTE: Por Angel Luis Jimenez, el 17 de junio de 2013, en Cambio Climático
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