La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) anunció que fortalecerá el proyecto de reservorios de aguas lluvias, como medida de adaptación a los efectos de cambio climáticos que pueden afectar a varios departamentos en épocas de menos lluvias.
La entidad pretende enfocar su trabajo en el campo y ofrecerle la posibilidad a los campesinos de contar con reservas del líquido vital para que puedan trabajar las cosechas cuando disminuyan las lluvias en el país.
Por tal motivo, desde la CAR se espera construir, al menos, 5.000 de estas estructuras a lo largo de varios departamentos, aunque actualmente cuenta con presencia en 72 municipios, la idea es lograr una cobertura total del territorio.
Al respecto, el director general de la CAR, Alfred Ballesteros, explicó que los reservorios le permitirán a los campesinos adaptarse a los cambios propios del calentamiento global, dado que este fenómeno producirá temporadas de sequía prolongadas.
“Un reservorio es un depósito de aguas lluvias, es la posibilidad que le vamos a dar a los campesinos de adaptarse a esta nueva realidad del cambio climático, realidad que nos va a obligar a transitar de períodos de sequía muy fuertes como el del fenómeno de El Niño en el que nos encontramos, a períodos de invierno intensos como fenómenos de La Niña que ya ha anunciado al Ideam”, comentó Ballesteros.
El director general agregó que con la medida se espera que los campesinos de escasos recursos puedan mantener sin interrupción las actividades, tanto de ganadería como agrícolas, puesto que serán construidos en los territorios que puedan ser más vulnerables a los cambios en el clima.
“Con esta estrategia vamos a permitirle a campesinos de escasos recursos que sus actividades ganaderas y agrícolas sean viables. Los vamos a construir principalmente en aquellos municipios que, de acuerdo a los estudios de vulnerabilidad por cambio climático, tengan más riesgos de desabastecimiento en las épocas de verano”.
De acuerdo con la información que compartió la entidad, cada estructura contará con una capacidad de 120 metros cúbicos, que serán instaladas en 25 municipios priorizados, que son: Ráquira, Saboyá, Chiquinquirá, San Miguel de Sema, Caldas, Buenavista, Simijaca, Susa, Fúquene, Lenguazaque, Cucunubá, Carmen de Carupa, Villapinzón, Tibirita, Nocaima, La Peña, Útica, El Colegio, Cachipay, Quipile, Guayabal de Síquima, Vianí, Beltrán, Jerusalén y Nariño, sitios en los que las obras ya están en marcha.
La CAR anunció que las personas que deseen ser beneficiadas con el proyecto deben presentar ante la dirección regional de la entidad, una vez la entidad vaya convocando, los siguientes requisitos:
- Certificado de uso de suelo que debe coincidir con actividades agropecuarias.
- Ser el dueño del predio y atestiguarlo presentando el certificado de libertad y tradición y adjuntar la cédula de ciudadanía.
- La autorización de ingreso al predio para que los funcionarios de la CAR puedan realizar el proceso de evaluación del predio.
Pero, no todos los interesados podrán acceder al proyecto, dado que “los reservorios se instalarán en terrenos donde los productores tengan planes de implementar modelos productivos como la plantación de frutales, especies forestales y/o cultivos de pan coger”.
El director general Alfred Ballesteros comentó que para que los reservorios sean instalados, los propietarios de los predios deberán firmar un acuerdo de conservación en los que se comprometen a sembrar entre 500 y 1.000 árboles de diferentes especies.
“Tenemos que tener la capacidad de adaptar a nuestros ciudadanos frente a esta nueva realidad del cambio climático, pero también queremos avanzar en esa gran meta de sembrar cinco millones de árboles en Cundinamarca y Boyacá, y que sean estos dos los departamentos más verdes de Colombia”.
La entidad explicó que este tipo de reservorios permiten el almacenamiento de aguas lluvias por escorrentía, razón por la cual se ubicarán estratégicamente para ayudar a disminuir la velocidad del agua y evitar una emergencia.
Fuente: Infobae
No hay comentarios.:
Publicar un comentario