Si de defensa del medio ambiente se habla, el doctor Mario Molina es uno de los nombres propios a los que el planeta debe agradecer la lucha por su sostenibilidad ambiental. El ganador del Nobel de Química en 1995 es uno de los asesores del presidente estadounidense, Barack Obama, en materia de medio ambiente y cambio climático. Una voz autorizada que orientó a Obama en las iniciativas que tenía que anunciar en su discurso de lucha contra el calentamiento global del martes pasado.
Molina, que acaba de visitar España para asistir a los cursos de verano de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) en Santander, considera que los mecanismos que hasta ahora se están tomando contra el cambio climático "no son suficientes, por lo que se necesita un acuerdo internacional", y pone como ejemplo la concienciación internacional por luchar contra el agujero de la capa de ozono, del que Molina fue precursor para descubrirlo.
Sin embargo, el Nobel reconoce que "sin Estados Unidos, es difícil que haya acuerdo, ya que si ellos no lo suscriben China, Brasil o México tampoco lo harán porque no sería equitativo". Y el motivo lo tiene claro: "El Congreso, dominado por el partido republicano, ha tomado como mantra negar la ciencia del cambio climático", afirma Molina; quien califica esto como "abursdo e irracional".
La educación ambiental es fundamental, pero emplazó a educar "ya", porque la Tierra "no puede esperar dos generaciones para que cale este mensaje, sino que necesita que los tomadores de decisiones estén educados en saber que el cambio climático es culpa de nuestras acciones".
Recordando el discurso de Obama, Molina ha manifestado que el presidente de Estados Unidos está, aún con el Congreso en contra, "muy dispuesto". El plan, ha especificado el ingeniero químico mexicano, está diseñado para tomar "medidas que no requieran la aprobación del Congreso".
Mario Molina considera esta política norteamericana como "un paso importante pero no suficiente", y ha vuelto a insistir en la necesidad -casi obligatoria para que prospere- de que Estados Unidos ratifique un acuerdo mundial.
Europa como ejemplo
Sí quiso destacar el liderazgo que Europa lleva a cabo en cuanto a políticas medioambientales de sostenibilidad, un espejo en el que deben mirarse el resto de países desarrollados. "Son admirables las acciones europeas a pesar de no existir un acuerdo amplio, aunque la crisis económica haya generado que reduzcan el presupuesto a estos fines", ha declarado Molina.
Aunque no sea el momento de aumentar las partidas destinadas a la investigación de más y mejores tecnologías amables con el medio ambiente, Molina cree que "es importante que, si no crecen, al menos no cortarlas porque hay un riesgo importante en ello y hay que tener en cuenta que no son inversiones a corto plazo".
Y dentro de Europa destaca a España. Nuestro país fue, para el mexicano, el abanderado de las energías limpias como la eólica o la solar, un hecho que ha sido muy positivo para que la conciencia medioambiental esté más desarrollada en nuestra orilla del Atlántico que en Estados Unidos. Sí cree que, poco a poco, la población estadounidense comienza a ver el cambio climático como un problema, algo que antes no se percibía así y que, además, "está en desacuerdo con la casi unanimidad de la comunidad científica".
Negar la evidencia del cambio climático es por lo que lucha este mexicano, con el poder de influencia en el hombre más poderoso de Occidente, Barack Obama. De momento, espera que la administración de Estados Unidos pase de las medidas "importantes pero no suficientes" a pactar unos mínimos internacionales.
FUENTE: elmundo.es, 1/ 07/ 2013
No hay comentarios.:
Publicar un comentario