El planeta Tierra se encuentra en estado crítico y el continente africano no es la excepción. Cada día la situación ambiental empeora y, si no mejoramos nuestros hábitos, las irreversibles consecuencias se harán notar muy pronto. África es el continente más caluroso, el más pobre y el segundo con mayor cantidad de ciudades peligrosamente contaminadas del mundo. De los más de 1.300 millones de personas que habitan en África, más del 60% de la población vive en condiciones de pobreza o pobreza extrema y debe soportar continuas crisis ambientales que se cobran millones de vidas humanas y animales al año.
Escasez de recursos
La escasez de recursos naturales indispensables para la vida, como el agua potable y la tierra fértil, es uno de los principales problemas ambientales en África. Afecta tanto a las poblaciones humanas como a las poblaciones animales, las cuales día a día deben luchar para conseguir agua y vegetación para abastecerse.
La escasez de agua en el continente se debe a la poca abundancia natural de agua dulce, a las escasas precipitaciones, a la contaminación de los cuerpos de agua existentes y al deficiente manejo de los recursos hídricos. Se calcula que aproximadamente el 60% de la población de los países de África subsahariana no tienen acceso directo a agua potable.
En el caso de la tierra, hay estudios que sugieren que el 65% de la tierra utilizada para cultivar en África está tan dañada que no permitirá la agricultura sostenible a corto plazo. Esta degradación del suelo implica que no haya suficientes terrenos cultivables para abastecer a la creciente población africana.
Contaminación del aire
Cuando hablamos de la contaminación en África no podemos pasar por alto la contaminación del aire. Muchos de los países con peor calidad de aire del mundo se encuentran en África: Somalia, Kenia, Chad, Sudán del Sur, Etiopia, Uganda, Nigeria, Congo, Angola, Sudáfrica, Malí, Ghana, Argelia y Egipto son algunos de los países africanos donde el nivel de polución en el aire es tan alto que resulta un daño preocupante para la salud. La Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), las infecciones y los cánceres en las vías respiratorias son tres de las diez principales causas de muerte humana en el mundo. Todas estas enfermedades están relacionadas con la contaminación del aire y, tan solo en África, ocasionan más de 1 millón de muertes cada año.
El deficiente establecimiento y cumplimiento de normativas que regulen la emisión de CO2 y otros gases perjudiciales son el principal factor de contaminación del aire en África. Además, diversos estudios indican que la exposición a las tormentas de polvo provenientes del desierto del Sahara causan más de medio millón de muertes al año en todo el continente porque propicia enfermedades respiratorias, cardiovasculares e infecciosas.
Contaminación del agua
Además de la escasez, existen otros problemas con el agua en África derivados de la contaminación. Frecuentemente, las aguas residuales y los desechos tóxicos incorrectamente tratados de las fábricas, el campo y las urbes acaban contaminado los escasos cuerpos de agua dulce que hay en África. Este agua contaminada altera las cadenas tróficas y los ecosistemas y es utilizada por muchas personas para beber, bañarse y cocinar.
El consumo de agua contaminada es la principal causa de contagio de parásitos intestinales, bacterias y virus que causan intoxicaciones y enfermedades diarreicas en humanos. Las enfermedades diarreicas están entre las 10 principales causas de muerte humana en países subdesarrollados y se sabe que en África se cobran entre 500 mil y 1,3 millones de vidas al año. También se ha demostrado que muchos de los peces y mariscos que se comercializan en África son nocivos para el consumo humano porque provienen de aguas contaminadas.
Deforestación e infertilidad de los suelos
África tiene 6 de los países con mayor cantidad de áreas boscosas deforestadas en los últimos 30 años a nivel mundial: República Democrática del Congo, Madagascar, Kenia, Camerún, Nigeria y Etiopía. Esta deforestación masiva se debe a:
- La sobreexplotación agrícola
- La ganadería
- La construcción de viviendas
- La industria maderera
- La utilización de leña como principal combustible a la hora de cocinar
- El tráfico ilegal de plantas
Además de la incidencia humana, la infertilidad de los suelos es una de las consecuencias de la ubicación geográfica de África. Debido a la naturaleza árida o semiárida del clima, la erosión del suelo y las constantes sequías, la degradación y desertificación natural de los suelos africanos tienen lugar. La degradación del suelo impide que este sea fértil. Teniendo en cuenta que el método de subsistencia de más del 40% de la población africana se basa en la agricultura, la creciente degradación y desertificación de los suelos son un problema ambiental y económico enorme.
Megaminería
En África se encuentran casi un tercio de los recursos mineros del mundo. En Ghana y Sudáfrica están dos de las mayores reservas de oro. Concretamente en Sudáfrica se encuentra el mayor yacimiento de cromo, mientras que en la República Democrática del Congo se encuentra la mayor reserva de coltán. Por otro lado, en Botsuana y República Democrática del Congo se encuentran dos de las reservas de diamantes más grandes del mundo. Básicamente, el continente africano posee casi el 20% del uranio a nivel mundial además de contener una gran abundancia de minerales como el hierro, el cobre, el cobalto y el platino.
La mayor parte de la explotación minera en África ocurre de manera ilícita. Estas actividades se desarrollan a un ritmo insostenible y perjudican el medio ambiente porque no están reguladas por ningún ente gubernamental. Tampoco son asesoradas por organismos medioambientales ni cumplen ninguna de las leyes de protección de los suelos, la flora, la fauna o los recursos naturales. Gran porcentaje de las ganancias de la minería son malversadas y utilizadas para financiar conflictos bélicos y gobiernos corruptos.
Caza furtiva y tráfico ilegal de la flora y fauna africana
En África, la caza furtiva y el tráfico ilegal de la flora y fauna endémica es tan elevado que a pesar de la persecución que se les da a los cazadores y contrabandistas, cada vez son más las especies que entran al listado de en peligro o en peligro crítico de extinción. Algunos ejemplos son los elefantes africanos y los leones. Se trata de un problema ambiental que enriquece a unos pocos pero perjudica a toda la humanidad y naturaleza.
Manejo deficiente de residuos
En África, la higiene y el saneamiento básicos son tan deficientes que se consideran un grave problema de salud pública. No existe un correcto tratamiento de los desechos sólidos ni las aguas residuales, lo que contribuye a la contaminación de los cuerpos de agua y la propagación de virus y enfermedades infecciosas. La escasez de recursos económicos impide financiar proyectos de saneamiento urbano y el agua es tan escasa, que más de la mitad de la población no cuenta con duchas, lavadoras o inodoros en sus hogares.
Sobrepoblación
África se considera un continente sobrepoblado porque alberga más personas de las que sus recursos naturales pueden abastecer. Más del 40% de la población africana se encuentra en situación de pobreza extrema y debido a que el continente tiene la mayor tasa de natalidad de todo el mundo (con un promedio de 4.7 hijos por mujer), se prevé que la escasez de recursos naturales, los problemas ambientales y el índice de pobreza se incrementarán significativamente en los próximos años.
Cambio climático
El cambio climático en África es de los más evidentes en el mundo. Esto se ve reflejado en el continuo aumento de la temperatura, la disminución de las precipitaciones y el empeoramiento de las sequías, la apresurada degradación de los suelos, la inundación de las costas y la desmesurada propagación de enfermedades infecciosas.
Fuente: Ecologia Verde
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